SICARIO ASESINO DE PABLO MEDINA, EXTRADICIÓN A PARAGUAY ES INMINENTE
30 Julio 2020
Por
Jean Georges Almendras-29 de julio de 2020
Wilson Acosta Marques, que así
se llama el sicario que participó en los asesinatos de Pablo Medina y Antonia
Almada (sobreviviendo al atentado la hermana de ésta última, Ruth) el día 16 de
octubre del año 2014, estaría en vías de ser extraditado desde el Brasil a
Paraguay, a juzgar por las últimas novedades procedentes del Gobierno brasileño
al notificar oficialmente a su par paraguayo el inicio de los trámites
correspondientes.
Tal la
noticia que en las últimas horas ganó las calles de la ciudad de Asunción,
capital del Paraguay. Los medios de prensa la dieron a conocer, y en especial
el diario ABC Color, en el que en una de sus páginas se tituló: “Renace
la posibilidad de extraditar de Brasil a uno de los asesinos de Pablo”.
De
acuerdo a lo consignado por este matutino el mensaje enviado al Paraguay por
Interpol de Brasilia dice en su parte más importante: ”les
solicitamos que inicien los procedimientos para su extradición –del
detenido- por
los canales diplomáticos”.
El individuo
sindicado como uno de los sicarios que segaron las vidas de Medina y de su
asistente Almada, tiene 48 años y fue capturado el pasado 29 de mayo de este
2020 en una vivienda rural del municipio de Chapada dos Guimaraes, estado de
Mato Grosso, distante uno 1.160 kilómetros del distrito paraguayo de Ypejhú, la
región en la que se materializó el doble asesinato, mediante la modalidad de
emboscada.
Como se
recordará, el clan Acosta estuvo en la trastienda de este repudiable e
indignante atentado que en el mes de octubre de hace unos seis años enlutó a
dos familias y al gremio periodístico. Sabido es que Vilmar “Neneco” Acosta (ex
intendente de Ypejhú) fue el autor intelectual del hecho de ahí que ahora mismo
cumple prisión después de haber sido condenado a casi 40 años de reclusión,
tras haber sido capturado el 4 de marzo de 2015 en el municipio de Caarapó,
estado de Mato Grosso do Sul, Brasil, y extraditado al Paraguay el 17 de
noviembre de 2015, tras un extenso debate judicial por su nacionalidad. El otro
sicario que secundó a Wilson en el doble crimen de Villa Igatimy, es su sobrino
Flavio Acosta, de 34 años, quien también se encuentra detenido, en el Brasil, y
cuya extradición al Paraguay no se concretó. Hoy deberá enfrentar cargos por
una agresión cometida en la región donde fue capturado (la ciudad brasileña de
Pato Branco, el 9 de enero de 2015) y después se le hará juicio en el Brasil
por la muerte de Pablo Medina y de Antonia Almada.
En cuanto
a su cómplice, Wilson Acosta (quien estuvo prófugo de la Justicia desde el
momento mismo de los hechos, vale decir desde hace casi seis años) debemos
recordar también, que en ocasión de su captura en el mes de mayo de este 2020,
desde tiendas gubernamentales paraguayas se había descartado la posibilidad de
su extradición, dado que él posee cédula de identidad brasileña “en apariencia”
legal y vigente. Pero esta situación no fue tal, al menos a partir del momento
en que se recibió en el Paraguay la notificación desde el Brasil aludiéndose al
trámite de su extradición, dándose cumplimiento a las formalidades de rigor y a
las normativas vigentes.
En ese
marco se informó que en su escrito el agente del Ministerio Público solicitó a
la magistrada que pida la extradición de Wilson, a través de los medios
legales.
También
trascendió que los próximos pasos serían los siguientes: que la jueza Arévalos
haga su pedido a la Corte y que esta instancia, a su vez, permita remitir el
exhorto al Ministerio de Relaciones Exteriores. Por su parte la Cancillería
deberá hacer los trámites ante la Justicia del Brasil, que de hecho fue la que
ahora –en forma inesperada- se definió abierta y dispuesta a autorizar que el
detenido sea derivado al Paraguay. En ese marco el Fiscal delegado del
departamento de Canindeyú (Paraguay) y al mismo tiempo Fiscal de la Causa, Dr.
Vicente Rodríguez, dijo públicamente que tenía firmes esperanzas en el
cumplimiento de esa extradición.
En el
diario ABC Color se ha señalado, a propósito de esta inminente extradición, que
Wilson Acosta Marques, no solo será llevado ante los estrados judiciales para
rendir cuentas por el doble crimen de Medina y su asistente Almada, sino además
por otros hechos criminales que oportunamente quedaron impunes.
Eventualmente
se podrá reabrir al caso del homicidio del político colorado Julián Núñez
Benitez, quien fuera ultimado a balazos en la noche del 1ero de agosto del año
2014. Sobre este hecho se supo, también oportunamente, que el crimen lo habrían
cometido, precisamente el ahora detenido: Wilson Acosta Marques y su hijo
Gustavo Acosta Gadea alias “El Chiqui”, utilizando a tales efectos una escopeta
calibre 12 y una pistola calibre 9 mm, las mismas armas que se habrían
utilizado en el doble atentado contra el periodista y su asistente, en el
caluroso mediodía del 16 de octubre del 2014, en un camino apartado de la zona
de Ypejhú, en el balneario Ygatimí.
También
desde el diario ABC Color, se le atribuye a Wilson Acosta Marques, el asesinato
a balazos del peón Teodoro González Domínguez, hecho criminal cometido
(aparentemente con las mismas armas) el día 29 de agosto en la entrada a una
estancia de la Colonia “1ero de Marzo” de la zona de Ypehjú.
Pero
también, según ABC Color, a Wilson Acosta Marques se le responsabiliza la
muerte del informante Víctor Franco Benitez, ocurrida el día 3 de octubre de
2014 en Villa Igatimí, siendo el autor intelectual Vilmar “Neneco” Acosta. Por
otra parte igualmente se consignó en el diario matutino paraguayo que Wilson
tendría pendiente su juzgamiento por el homicidio del policía civil del Brasil,
Marcilio de Souza, hecho cometido el día 12 de febrero, también del 2014, en
Ipejhú.
Francisco Medina: “Deseo
que no haya un nuevo impedimento de la justicia”
En el
contexto de esta buena nueva respecto al futuro del sicario Wilson Acosta,
recabamos la opinión y el sentir del hermano de Pablo Medina. En términos
enérgicos, Francisco Medina, hizo especial hincapié en el accionar de la
justicia.
“La verdad, desde el momento de su captura en Brasil, nunca
perdimos la esperanza que el sicario Wilson Acosta Marques sea juzgado en
nuestro país. No es por la falta de confianza de la justicia de nuestro vecino
país, sino porque consideramos justo que un sicario pague su culpa en el país
donde cometió el asesinato. Es nuestro deseo que no haya otro nuevo impedimento
de la justicia de Brasil y, en poco tiempo más, sea realidad su extradición al
Paraguay. Si ocurriera así, sin dudas, los integrantes de nuestra familia
estaremos muy contentos y Pablo, allá en el cielo, también sentirá lo mismo”.
Dyrsen Medina:”Quizás lo
pondrán en una celda vip al igual que a “Neneco” Acosta”
También
solicitamos la reflexión de uno de los hijos de Pablo Medina. Nos estamos
refiriendo a Dyrsen, cuyas apreciaciones giraron en torno a la forma en que el
sicario detenido vivirá su reclusión una vez que sea condenado, juicio oral
mediante. Las palabras de Dyrsen Medina visibilizaron su preocupación respecto
a los verdaderos responsables del crimen de su padre, en el sentido de
puntualizar que más allá de los sicarios y del ideólogo Vilmar “Neneco” Acosta
habría más responsables.
“La posible extradición de Brasil de uno de los asesinos de mi
padre Pablo es una gran noticia. Si bien por un lado puede ser mejor que lo
traigan al Paraguay (Brasil no es garantía absoluta) ya que el pedido de
justicia se lo estamos exigiendo al Estado Paraguayo para que se declare
responsable, estoy convencida de que este asesino de mi padre recibirá todos
los privilegios. Y hasta la protección de algunos políticos; y quizás lo
pondrán en una celda vip al igual que al autor intelectual Vilmar
"Neneco" Acosta. Nosotros los familiares víctimas eso lo
consideraríamos una burla y en ese sentido lo tomamos como una mala noticia,
puesto que este tipo de criminal debe ser castigado como corresponde. Anhelo de
corazón que su extradición sea sólo un inicio de una serie de eventos de
justicia que tenemos por conseguir en nuestro Paraguay. No descansaremos hasta
que caigan todos los responsables y lucharemos con mayor fuerza”.
Desde
nuestra redacción, y seguramente desde el Movimiento Our Voice, que en su
conjunto nos sentimos estrechamente ligados a la causa de nuestro colaborador
periodístico Pablo Medina, asesinado por la mafia paraguaya, no hacemos más que
redoblar esfuerzos para seguir por nuestro camino de denuncia del feroz
entramado de corrupción y criminalidad que hubo entorno a los hechos
sangrientos del 16 de octubre del 2014, donde cayó también bajo las balas
asesinas mafiosas, la joven Antonia Almada.
Sicarios
e ideólogos están formando parte de un repudiable marco mafioso donde el
sistema político (y el poder) tienen mucho que ver con la sangre derramada de
los mártires del periodismo libre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario